Opinión
Archive

Duele decirlo, pero, en verdad tenía más seriedad “La Tremenda Corte” de la radio de los años ’50 (un programa cómico desarrollado en un juzgado), que el grupo que pretende ocupar los sillones del Tribunal de Justicia más alto de la Nación. ¿Cómo aceptar en la presidencia a un sujeto que en su vida ha litigado en todas las materias, que pueda demostrar un currículo de décadas de litigio, y, por supuesto, de sólidos conocimientos en derecho (sí, porque se puede litigar mucho tiempo, pero no ser buen abogado), pero, sobre todo, de contar con décadas de experiencia profesional en la impartición de justicia? ¿Cómo? ¡Imposible!

       El gobierno para hacerse del control total del Poder Judicial realizó la costosísima farsa de unas ‘elecciones’ para colocar en la impartición de justicia a gente de MORENA al igual que a simpatizantes y compromisos políticos, derribando con ello la República y la democracia, abriendo la puerta de par en par a la dictadura. Donde no hay justicia: tampoco hay democracia, ni estado de derecho.

     ¿Cómo esperar que personas que carecen de experiencia en la carrera judicial impartan justicia? Es tanto como poner en el quirófano, con bisturí en mano para una cirugía mayor, a una persona por el simple hecho de tener título de médico. Para ser ministro de la Suprema Corte de la Justicia de la Nación el título de abogado es apenas el boleto de entrada al mundo de la impartición de justicia, al que se habrá de agregar, además de una gran inteligencia, un conocimiento doctoral de las leyes mexicanas y sus procedimientos, una larga experiencia profesional en dicha impartición, pues no es lo mismo ser litigante que impartidor, y menos en ese alto cargo.

     El primero sólo ve por su cliente. El segundo tiene que analizar en detalle hechos, circunstancias, legalidad, apego a derecho, procedimientos realizados, y muchos otros aspectos, para finalmente resolver conforme a derecho. Nada más y sin presiones políticas o económicas (por eso los juzgadores en el ámbito federal siempre han tenido buenos sueldos y prestaciones).

     El hombre que “ganó” la farsa esa de las “elecciones judiciales” gracias a los acordeones hechos por MORENA y sus huestes, además de carecer absolutamente del perfil para tan importantísimo deber republicano, no tiene tampoco la menor idea del cargo que ilegal, ilegítima e irresponsablemente AMLO y SHEINBAUM le están regalando.

     Para justificar semejante desatino, daño a la justicia y a la República, apelan al origen del candidote (no podría ser jamás candidato a ocupar la SCJN un individuo así, sin cumplir absolutamente ninguno de los requisitos). Apelar a su origen indígena comparándolo con el Lic. Benito Juárez García es francamente ridículo e insultante. Podrían hacerlo también con el “chapo” ¿se parecen tantito no? ¿ambos son de la sierra, o no?

     Un comparativo serio que echa por tierra esta burda farsa —aunque sabemos que para los de MORENA no existe la vergüenza— se ha de señalar que el Lic. Benito Juárez García desarrolló una larga y sólida carrera judicial desempeñando diversos cargos. En 1842 es nombrado Juez civil y de hacienda, en 1844 ocupa la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Oaxaca, y no es, sino hasta 1857 —y luego de desempeñar diversas responsabilidades públicas— que el Lic. Juárez es nombrado Presidente de la Suprema Corte.

     Así que no era ningún neófito cuando asumió semejante responsabilidad nacional, como tampoco ignorante, ni mucho menos improvisado. Tenía la capacidad y la experiencia que sólo los años de ejercicio (e inteligencia) pueden concederSin olvidar que Juárez era un defensor inquebrantable del estado de derecho. Valga señalar que durante su mandato —además de combatir a los invasores franceses—, antes que otra cosa, dedica parte de sus fuerzas y capacidad para combatir a las bandas delincuenciales, que, dicho sea de paso, aprovecharon los días turbulentos de la invasión para cometer toda clase de fechorías.

     Juárez a diferencia de López Obrador que les ofreció “abrazos y no balazos” a los plateados los metió a las cárceles y a los que se opusieron les metió balazos. Para el presidente oaxaqueño, a diferencia del tabasqueño, la ley sí era (y es) la ley.

     En su novela histórica “El Zarco”, el escritor Ignacio M. Altamirano narra un cuadro de violento horror tan semejante al que padecemos actualmente, pero que el gobierno no atacaba debidamente por estar combatiendo a los invasores franceses. Casi al final, en el capítulo XXIV, relata una charla entre un mexicano de bien agraviado por los criminales al que el Presidente Juárez le otorga armas y todo su apoyo para acabar con esas alimañas: “…usted es un hombre de bien y el más a propósito para perseguir a esos malvados que infestan el sur del estado de México, y a quienes el gobierno por sus atenciones no ha podido destruir… ¡Esto es un escándalo y es preciso acabar con él! ¡Qué desea usted para ayudar al gobierno!…”

     A diferencia del héroe de verdad llamado Benito Juárez García, el tirano mentiroso de Macuspana se rodeo de plateados, de individuos como El Zarco de la obra de Altamirano, sólo que con armas sofisticadas, crueldad extrema, y todo, pero todo el apoyo del estado.

     Volviendo al presente. En la Suprema Corte se decide el rumbo de la justicia de la Nación, y si la planilla de improvisados e incondicionales colocados por AMLO y SHEINBAUM serán los encargados de impartirla, la libertad y la justicia de los mexicanos se extinguirá a partir del día que tomen el control.

     Y si la Suprema Corte no se puede aceptar; tampoco el resto de los supuestos elegidos para Magistrados y Jueces, puesto que no se trata de reinas de kermes o de la primavera. Lo que se requiere es capacidad, conocimientos, experiencia judicial probada, y, por supuesto, integridad y ética. Si lo que querían era acabar con la corrupción, lo primero que se debió hacer era evaluar a los que ya se tenía y depurar al Poder Judicial de todo miembro no apto o detectado, y las plazas que quedaran vacantes, ocuparlas con los mejores que contaran con el perfil profesional adecuado (carrera judicial incluida); pero no con una tramposa y dolosa pseudo elección que solo sirvió para acomodar a la raza de MORENA.

      Y si después de todo lo dicho en esta y otras columnas por compañeros de la prensa, el gobierno de Claudia Sheinbaum se empeña en continuar con su programa dictatorial para hacerse del poder absoluto, NO QUEDA NADA MÁS POR DECIR. ¡DÍA DE LUTO NACIONAL SERÁ ESTE!

¡Hasta el próximo sábado si Dios nos permite!

Tiempo de lectura: 5 min

Hoy Israel es el centro de la visión de todos los países de la Tierra. Sus acciones son analizadas con escrutinio único, para aprobar o criticar, aunque las segundas son mayores, razón que motivó escribir el presente artículo ya que para entender lo que sucede en esa zona del planeta, obligadamente se deben tener en cuenta tres factores fundamentales.

     Primero: se trata de un asunto que se origina en el campo de la religión y la única fuente o sitio que nos puede orientar con verdad y certeza es la Biblia, toda vez que en sus páginas se narra la decisión Divina de formar un pueblo cuya razón de ser y propósito deja precisados. ¡El rescate y restauración de la humanidad caída para reconciliarle con Dios, y con ello, dar cabida y cumplimiento a sus planes eternos (cuestión que han ignorado muchos judíos y cristianos en todas las épocas; ni qué decir entonces del resto)!

     Segundo: en oposición a dicha decisión Divina, el ángel caído desde hace cuatro mil años ha desatado una guerra de aniquilación y destrucción permanente en contra del pueblo hebreo (judío), incitando en su contra a los pueblos vecinos y a partir del siglo VII d.C. al islam. La Biblia recoge infinidad de ataques como se observa en algunos textos que se reproducen:

—“Sucedía que cuando Israel había sembrado, subían los madianitas y amalecitas y los hijos del oriente contra ellos; subían y los atacaban. Y acampando contra ellos destruían los frutos de la tierra, hasta llegar a Gaza; y no dejaban qué comer en Israel, ni ovejas, ni bueyes, ni asnos…” (Jueces 6:3-4).

—“Entonces los filisteos se juntaron para pelear contra Israel, treinta mil carros, seis mil hombres de a caballo, y pueblo numeroso como la arena que está a la orilla del mar…” (1 Sam 13:5).

—“Dieron aviso a David, diciendo: He aquí los filisteos combaten a Keila, y roban las eras…” (1 Sam 23:1).

—“Hazael, pues, rey de Siria, afligió a Israel todo el tiempo de Joacaz” (2 Reyes 13:22)

—En el noveno año de Sedequías rey de Judá… vino Nabucodonosor rey de Babilonia con todo su ejército contra Jerusalén y la sitiaron… (y) se abrió brecha en el muro de la ciudad. Y entraron todos los príncipes del rey de Babilonia…Y degolló el rey de Babilonia a los hijos de Sedequías en presencia de éste, haciendo asimismo degollar el rey de Babilonia a todos los nobles de Judá. Y sacó los ojos del rey Sedequías, y le aprisionó con grillos para llevarle a Babilonia. Y los caldeos pusieron a fuego la casa del rey y las casas del pueblo, y derribaron los muros de Jerusalén”. (Jeremías 39:1-8).

Aconteció en los días de Asuero, el Asuero que reinó desde la India hasta Etiopía sobre ciento veintisiete provincias (1:1)… fueron enviadas cartas por medio de correos a todas las provincias del rey, con la orden de destruir, matar y exterminar a todos los judíos, jóvenes y ancianos, niños y mujeres en un mismo día, en el día trece del mes duodécimo, que es el mes de Adar, y de apoderarse de todos sus bienes” (Ester 3:13).

 

     Sin olvidar, por supuesto, que además de incontables invasiones y masacres, Israel fue llevado a la diáspora por los asirios; por los caldeos o babilonios; invadido y dominado por los seléucidas, y, finalmente por los romanos que destruyen Jerusalén en el año 70 d.C., y en el 135, luego de una fallida guerra de liberación, el pueblo judío es lanzado a la gran diáspora, cambiando el nombre a su país Israel por el de “Palestina” y a Jerusalén por “Aelia Capitolina”, en un intento por borrar su nombre y memoria para siempre.

    Tercero: Como se puede apreciar en los textos bíblicos reproducidos, así como en los hechos narrados, el antisemitismo ha sido parte de la existencia del pueblo judío, de su padecer milenario en su propia tierra y entre las naciones. El último texto bíblico citado se origina en el imperio medo-persa en el siglo V a.C., es decir, en el actual país de Irán, país que ha financiado a los terroristas de Hezbolá, Hamás y otros grupos durante décadas, ya que desde siempre han querido destruir a Israel. De hecho, en la avenida Jomhuri de la ciudad de Mashhad, el gobierno actual ha construido un reloj público anunciando la destrucción total de Israel.

     El diario español El País publicó hace unos años esta expresión pública de odio irracional: “ la ciudad iraní de Mashhad se encuentran desde hace unos días una gran pantalla digital con la cuenta atrás hacia la desaparición de IsraelSegún este presagio al “régimen sionista”, como lo denomina la propaganda oficial, le quedan en torno a 8.700 días de vida, que el reloj va ajustando minuto a minuto y segundo a segundo” (8/Nov/2016).

     ¿Podría país o persona alguna esperar a que su enemigo gratuito lo desapareciera del planeta? De manera que la acción de Israel obedece a un simple acto de defensa, de supervivencia ¿O por ser judíos tenían qué esperar a que el ayatola en turno los extinguiera como lo pretendía Hitler y sus huestes?

     El asunto, y lo señalo como profesional del tema (teología), se origina como ya se dijo en el campo espiritual. Intentando decirlo de la forma más sencilla posible: ¡El Dios de judíos y cristianos es el mismo y su mensaje es para ambos grupos! Si a lo largo de la historia han ocurrido pogromos, Inquisición, masacres y persecuciones originadas desde el lado cristiano, ha sido precisamente por desconocer las Escrituras (Biblia); por querer llevar la fe a su gusto, y, por supuesto, por llevar a cuestas el pesado fardo del antisemitismo, que no es otra cosa que un odio irracional contra este pueblo, y lo diré con precisión: originado en el mismo Infierno al considerar el ángel caído que de este pueblo vendría el Salvador de la humanidad (claro, de la que crea y quiera salvarse): a quien pretendió destruir, pero, que al  matarlo, el Mesías con su sangre inocente —en la Pascua del año 33— pagó los pecados de todos y con ello, reconcilió al hombre caído con Dios (relación rota desde el Paraíso) cuya santidad y justicia no permiten la impunidad (como sucede entre los gobiernos y los hombres).

      Sintetizando: el ángel malvado queriendo matar al judío YESHUA (JESÚS), propició que el Mesías nos redimiera y reconciliara con Dios a través de su sacrificio, abriendo el Dios de judíos y cristianos la puerta de la salvación eterna a todo ser humano que le busque de todo corazón.

     Sin embargo, en el siglo VII, un hombre llamado Mahoma inventa una nueva religión (cuya deidad ‘Alá’ no tiene nada que ver con Yahweh). La Biblia es un libro donde Dios mismo se revela a la humanidad caída para traerle su mensaje de salvación. En cambio, el Corán, es un libro cuya deidad y mensaje son inventados por Mahoma y en cuyas páginas judíos y cristianos somos simples infieles, por lo que autoriza a sus seguidores que nos hagan la yihad, y de no convertirnos a su credo, destruirnos.

     En este punto radica el origen de todo lo que estamos padeciendo, con, y desde el mundo musulmán. La inmensa mayoría de los occidentales no conoce el pensamiento islámico, ni lo que representamos para los seguidores de este credo violento, cuya finalidad no es otra que “convertirnos”, y de negarnos, destruirnos. De manera que Israel lo único que está haciendo es defenderse y tratar de sobrevivir. Lamentablemente ignorancia, derechos humanos malentendidos, parciales y sin información real, pero sobre todo, un odio nacido y promovido desde el mismo Infierno; pretenden acabar con Israel, ignorando que de acuerdo a la fe judeocristiana, Yeshua el Mesías (Jesucristo) retornará con poder para reinar con gloria en Jerusalén y entre su propio pueblo (siendo la cristiandad fiel parte de todo esto). Aclarando: esto es lo que dice la Biblia y lo que la historia ha recogido y nos narra.

¡Hasta el próximo sábado si Dios nos permite!

Email: mahergo1950@gmail.com

Tiempo de lectura: 7 min

En la misma medida que pasa el tiempo los gobiernos de la llamada 4-T han mostrado su total incapacidad para resolver los grandes y múltiples problemas del país. El encargo de gobernar (para el cual buscaron el voto) les ha quedado demasiado grande. Su formación de simples revoltosos, ajenos por supuesto al trabajo y verdadero compromiso de formar un México mejor, les ha exhibido como lo que son: simples vándalos gritones que quieren resolver todo con declaraciones, manifestaciones, o pleitos mediáticos y en las redes. ¡No dan para más!

El problema, y gravísimo, es que el país se ha estado hundiendo a pasos agigantados y estos inexpertos de MORENA solo atinan a culpar a otros, pues, por su propia formación y bagaje desconocen del todo cómo se resuelven los problemas. Los de MORENA solo saben y han sabido darlos.

Su líder, el Hitlercito de Macuspana, aunque pretenda disfrazarse de ‘izquierdista’, en realidad es apenas un simple dictadorzuelo, un hombre sin ninguna capacidad para construir y con todas las mañas y odios para destruir. Su desgraciado mal gobierno a eso se dedicó, a destruir México: la vida republicana, la democracia, las instituciones, a dividir a los mexicanos, atacar las fuentes de trabajo de varias formas, entre otras, abrazando a las bandas de criminales —los que sin demora alguna comenzaron a extorsionar a todo aquel que trabajara y produjera ganancias—. De manera que el título del libro de Pablo Hiriart le describe perfectamente: «El gran destructor».

Inmersos, pues, en un panorama interno terrible, violento y desolador, no es lícito, ni mucho menos aceptable, que Claudia Sheinbaum se desentienda de los problemones de México para buscar camorra y banderas politiqueras fuera del país.

Eso de amenazar al ultra archi recontra mega soberbio Donald Trump con hacerle manifestaciones en su país, además de ilícito y carente de la diplomacia más elemental, le exhibe como si eso fuera lo único que supiera hacer: ¡Organizar marchas y reclamos públicos! ¿De ese tamaño es su capacidad para el cargo?

Como se le dijo desde este espacio a su jefe AMLO y hace no mucho también a ella, las palabras y ejemplo de Amadeo de Saboya en España son una salida digna para no seguir dañando y hundiendo al país (o, romper su yugo con el de Macuspana y comprometerse por los mexicanos).

 

Grande fue la honra que merecí a la nación española eligiéndome para ocupar su trono; honra tanto más por mi apreciada, cuanto que se me ofreció rodeada de las dificultades y peligros que lleva consigo la empresa de gobernar un país tan hondamente perturbado. Alentado, sin embargo, por la resolución propia de mi raza, que antes busca que esquiva el peligro, decidido a inspirarme únicamente en el bien del país, y a colocarme por cima de todos los partidos, resuelto a cumplir religiosamente el juramento por mí prometido a las Cortes Constituyentes, y pronto a hacer todo linaje de sacrificios por dar a este valeroso pueblo la paz que necesita, la libertad que merece y la grandeza a que su gloriosa historia y la virtud y constancia de sus hijos le dan derecho, creí que la corta experiencia de mi vida en el arte de mandar seria suplida por la lealtad de mi carácter, y que hallaría poderosa ayuda para conjurar los peligros y vencer las dificultades que no se ocultaban a mi vista, en las simpatías de todos los españoles amantes de su patria, deseosos ya de poner término a las sangrientas y estériles luchas que hace tanto tiempo desgarran sus entrañas.

     Conozco que me engañó mi buen deseo. Dos años largos ha que ciño la corona de España, y la España vive en constante lucha, viendo cada más lejana la era de paz y de ventura que tan ardientemente anhelo. Si fuesen extranjeros los enemigos de su dicha, entonces, al frente de estos soldados tan valientes como sufridos, sería el primero en combatiros; pero todos los qué con la espada, con la pluma, con la palabra agravan y perpetúan los males dé la nación son españoles, todos, invocan el dulce nombre de la patria, todos pelean y se agitan por su bien; y entre el fragor del combate, entre el confuso, atronador y contradictorio clamor de los partidos, entre tantas y tan opuestas manifestaciones de la opinión pública, es imposible atinar cual es la verdadera, y más imposible todavía hallar el remedio para tamaños males.

    Lo he buscado ávidamente dentro de la ley, y no lo he hallado. Fuera de la ley no ha de buscarlo quien ha prometido observarla…   Estas son, señores diputados, las razones que me mueven a devolver a la nación; y en su nombre á vosotros, la corona que me ofrecía el voto nacional, haciendo de ella renuncia por mí, por mis hijos y sucesores.

     Estad seguros de que al despedirme de la corona no me desprendo del amor a esta España tan noble como desgraciada, y de que no llevo otro pesar que el de no haberme sido posible procurarla todo el bien qué mi leal corazón para ella apetecía.

                                         Amadeo. Palacio de Madrid, 11 de febrero de 1873

 

Y es que, mientras Claudia Sheinbaum anda afanada con Estados Unidos para resolver sus errores políticos y diplomáticos, aquí en México mayores problemas que esos hacen infelices a más de 100 millones de mexicanos. Bandas de terroristas (por años amigochos y socios en andadas de López Obrador) que se dicen “maestros”, pero que no lo son, un papelito regalado por razones políticas no hace maestro a nadie, año con año secuestran a los habitantes de la ciudad de México impidiéndoles la libre circulación, adueñándose del zócalo, avenidas, calles, edificios públicos y privados, destruyendo mobiliario público y privado e impidiendo el libre tránsito de los ciudadanos (con todos los daños que esto significa y conlleva), sin que autoridad alguna, es decir, NADIE HAGA VALER LA LEY ANTES ESTOS TERRORISTAS.

Y como el mal ejemplo cunde, los dizque aprendices de maistros de Chiapas también vinieron a joder y dañar la vida de los habitantes de la capital. Con impunidad, claro, como a sus mentores de la CNTE. En otras palabras: para CSP y para MORENA los únicos que valen en México son los delincuentes y los desmadrosos. Los ciudadanos pacíficos y trabajadores que mantienen de píe al país no valen nada, absolutamente nada.

A nivel nacional la cada vez mayor fauna delincuencial como jaurías de fieras endemoniadas pululan por todo el territorio con total impunidad, asesinando, secuestrando, robando, extorsionando, despojando, desplazando, apoderándose de ranchos, tierras, negocios, casas y edificios con total descaro. ¿Con un poder judicial nuevo integrado por puros de MORENA y gente sin ninguna capacidad ni experiencia judicial resolverán semejantes problemas? Presidenta CLAUDIA: ¡primero resuelva los problemas de casa, los de fuera, si su gobierno y la gente de MORENA cierran la boca, es probable que se mejoren las cosas pronto!

¡Hasta el próximo sábado si Dios nos permite!

Email: mahergo1950@gmail.com

Tiempo de lectura: 6 min

No existe nada peor que engañar con mentiras a las personas, en este caso (entre diez y quince) millones de mexicanos que se tragan sus cuentos falaces y, utilizar sus votos con fines políticos abismalmente distintos de los que dicen o aseguran. López Obrador y Claudia Sheinbaum han destruido la República y sus instituciones para dar paso a una vulgar y perniciosa dictadura cuya consumación se dio el pasado 1º de junio, todo bajo el engaño, la simulación, y la hipocresía.

En una farsa absurda e ignominiosa éste par de tartufos mostraron delante de propios y extraños lo que son capaces de hacer. De convertir un estrepitoso fracaso electoral en el que solo salió a votar el 13 por ciento y de esa minúscula masa social cuando mucho el 8 lo hizo para apoyar su fechoría —en contra de la democracia y la República—, anunciando y festejando un “triunfo” que sólo existe en sus mentes pervertidas y corazones emponzoñados.

En el año 2011 publiqué el primer tomo de mi obra titulada «MÉXICO: ¿ESTADO FALLIDO O PAÍS TRAICIONADO?» Y en el año 2013 el segundo. Ambos libros recogen nuestra historia patria a partir de los días previos a la guerra de Independencia, culminando sus páginas (756 en total) con el gobierno de Felipe Calderón.

En mi obra, y como advierte el título, se remarca el grave problema que hemos padecido los mexicanos durante toda nuestra existencia: ¡La traición de los hombres en el poder! Nacidos la mayoría en hogares en los que los valores cristianos y los ideales patrióticos se fomentaban, para desgracia de todos (y todas nuestras generaciones), hemos padecido un linaje entroncado a Judas (el traidor, sí, porque otros judíos con ese mismo nombre son dignos de todo honor y respeto, como Judas Macabeo, por citar a uno).

En el primer tomo del libro mencionado, narro los terribles hechos de la traición que provocó que la Independencia tardara una década más, y mucha sangre inocente corriera, pobreza y mucho dolor social:

 

“Al día siguiente… los caudillos de la independencia salen de la ciudad de Saltillo en una columna integrada por catorce coches y escoltados por un millar de hombres… El itinerario fue el siguiente: Saltillo, Santa María, Anhelo, Punta del Espinazo del Diablo y Acatita de Baján. En este sitio ya se encontraba el traidor Ignacio Elizondo con 350 hombres bien armados y frescos para entrar en acción… (era el 21 de marzo de 1811). El otrora insurgente Ignacio Elizondo tiene la paciencia de hacer gala de su perversión al montar guardia con su gente para que pasen los coches de los caudillos ordenando a sus hombres que saluden con toda cortesía, lo que hace creer a los insurgentes que se trataba de fuerzas amigas. Uno a uno de los caudillos son aprehendidos…” (pág. 70).

 

     Y así como el perverso Ignacio Elizondo traicionó la causa de la Independencia (movido por sus ambiciones y egolatría desmedidas), igual lo hicieron Andrés Manuel López Obrador y Claudia Sheinbaum Pardo, traicionando a México, su vida Republicana y la Democracia. Implantando de manera ilegítima —aprovechándose de la ignorancia e indiferencia de millones de mexicanos— una vulgar dictadura al estilo de Cuba, Venezuela y Nicaragua.

Atenidos a que el proceso de desmantelamiento de la República no podía realizarse de un día para otro, y que, de decirlo públicamente la inmensa mayoría de los ciudadanos se hubiera opuesto. Este par de traidores a base de engaños y mentiras cotidianas han manejado el discurso público desde Palacio inventando una realidad nacional que no existe, haciéndoles creer a los ingenuos e indiferentes (con el apoyo de cinco o seis millones de fanatizados dispuestos a todo) que seguimos en la “democracia”, al punto de decir el Mussolini de Macuspana, que “Claudia Sheinbaum es la mejor presidenta del mundo”.

Una realidad que llegado el momento les permitirá quitarse la máscara y mostrarse tal y como son. Una tribu de violentos anarquistas, hambrientos de poder y riqueza a los que el poder ha embriagado hasta perderse y descuidar del todo las formas, pues como decía Don Alfonso Reyes “no se es dictador en vano”.

En mi más reciente libro «De la Alemania Nazi al México de López Obrador»; narro y comparo la situación política, social, y económica de Alemania en los años ’30 del siglo pasado; con la situación actual de México. Los mecanismos utilizados por los nazis para desmantelar la República y la Democracia para instaurar paso a paso una dictadura, que no sólo convirtió Alemania en un monstruo sediento de sangre y riquezas, sino en una amenaza para toda Europa (y otras partes del mundo).

El mismo patrón ha utilizado López Obrador y la 4-T (MORENA) para desmantelar los poderes e instituciones republicanas, consumando su traición el pasado domingo 1º de junio con la dizque “elección judicial”. Elección que recuerda la manera como Hitler y sus huestes asaltaron, primero el Reichstag (Congreso) para tener el control, y al poco tiempo el Poder Judicial, echando fuera y con total violencia y humillación a todos los funcionarios —en primer orden a los de origen judío— poniendo en su lugar a nazis con ninguna carrera, ni experiencia ¿Le suena parecido el método?

¿No dijo acaso el Mussolini de Macuspana que le bastaba con capacidad de un 10% (para los cargos públicos) pero con un 90% de fidelidad a él. Así son los dictadores. Quieren ser el centro de la adoración política y humana (un tema francamente diabólico). En la dictadura de AMLO él es y debe ser el centro de todo y de todos. El compromiso de Claudia Sheinbaum y de su “gobierno” es ante todo con él y para él. En la autollamada 4-T no hay país, no hay mexicanos, no hay ley, no hay poderes; solo hay un inmenso territorio en el que tiene que reinar este impostor. Un coto de caza para que esta banda de incapaces, improvisados y ambiciosos den rienda suelta a sus instintos animales.

Y si todo lo anterior nos horroriza debido a lo que significa y el daño que nos implica y representa, saber que la inmensa mayoría de los integrantes de dicha Banda política son personas con cero capacidad para los cargos que detentan, la realidad resulta deprimente ¿Ese es el país que queremos para nuestros hijos y nietos?

No queriendo alargar el comentario, basta señalar que entre las bandas de narcos, asesinos, huachicoleros, extorsionadores (de todo tipo) y maistros anarquistas de la CNTE (acompañados de normalistas aprendices de guerrilleros) han hostigado hasta el extremo al país y la liga de la estabilidad social está a punto de romperse. De sumir al país en el caos y la ingobernabilidad. En suma: ¡La traición contra México ha sido total! Claudia Sheinbaum está a tiempo de zafarse de semejante delito (tipificado por el art. 123 del Código Penal Federal) y anteponer a sus deudas políticas, sus deberes para con México y los mexicanos. De lo contrario tarde o temprano el estado de derecho les llamará a cuentas a ambos.

¡Hasta el próximo sábado si Dios nos permite!

Email: mahergo1950@gmail.com

Tiempo de lectura: 6 min
Page 1 of 1571234102030...Last »